Por: Dr. H. Roberto Herrera
Cáceres
Comisionado Nacional de los
Derechos Humanos
La migración irregular es un fenómeno social que responde
a la necesidad que experimentan los hondureños y hondureñas de buscar mejores
oportunidades de vida que les permitan satisfacer sus necesidades básicas y las
de su familia. Sus causas son diversas y
complejas, entre ellas pobreza y exclusión social, violencia, delincuencia, catástrofes
naturales.
Lo que más importa
es tener presente que el migrante hondureño y su familia son seres con dignidad humana, por lo que es
necesario e imperativo lograr el
cumplimiento de las responsabilidades de todos los Estados (de origen, tránsito
y destino) de asegurar el respeto y efectividad de los derechos humanos
que son inherentes a todas y todos los
migrantes.
Con el
acompañamiento esperado de la cooperación internacional, el Estado hondureño debe
desactivar progresivamente el negativo proceso cíclico de la migración obligada
que, aún en caso del retorno de migrantes, ha llevado forzosamente a muchos de
ellos a reintentar nuevamente el recorrido de esa ruta ingrata. Ese ciclo de
migración forzada de parte de nuestra gente debe cesar progresivamente,
aplicando una política integral y comprensiva que impulse el desarrollo humano
con seguridad democrática en los municipios y promoviendo la dignidad humana de
los habitantes y su participación
efectiva en el impulso del crecimiento económico inclusivo y en la distribución
equitativa de la riqueza producida.
El fenómeno de la
niñez migratoria -no acompañada- representa un desafío aún más grave para el
Estado hondureño, padres y comunidades
locales de origen, pues evidencia una inadecuada protección y garantía de los
derechos fundamentales de la niñez y del interés superior de asegurar su, sano y socialmente productivo,
desarrollo físico y mental.
La
institucionalidad del Estado de Honduras debe continuar sus esfuerzos por
garantizar un entorno apropiado para el respeto y cumplimiento de todos los
derechos de la niñez y de los migrantes
en general, respetando su dignidad humana y atendiendo siempre el interés
superior del niño y la niña.
Es necesario evitar
también la migración de niños y niñas no acompañados, pues no obstante la buena
disposición de los Gobiernos, faltan condiciones adecuadas para evitar que, en
la ruta, sean víctimas de violación a sus derechos fundamentales por abusos de
autoridades o delincuencia común u organizada mediante actos de extorsión,
abuso físico y sexual, secuestro, trata de personas, explotación,
discriminación y otros.
El servicio
consular de Honduras debe estar presente y velar ininterrumpidamente por el
buen trato y respeto efectivo de los
derechos humanos fundamentales de los migrantes hondureños y hondureñas en
cualquier parte del mundo donde se encuentren.
La migración tiene
un alcance transnacional por lo que es crucial la unidad de propósitos y de
acciones en Centroamérica para garantizar la inviolabilidad de la dignidad
humana de sus habitantes.
En esa dirección:
- Exhorto respetuosamente a los gobiernos centroamericanos a cumplir
con sus compromisos que se sustentan:
a)
En el
reconocimiento de que la pobreza lesiona la dignidad humana de los habitantes y
constituye una amenaza a su seguridad y
a la estabilidad democrática de nuestras sociedades, por lo que deben priorizar
los esfuerzos por superar sus causas estructurales y mejorar la calidad de vida
de las poblaciones;
b)
En la
necesidad de adoptar posiciones y estrategias conjuntas por la defensa legítima
de los migrantes centroamericanos.
- Insto nuevamente a mis homólogos centroamericanos a considerar la
importancia de reactivar el Consejo Centroamericano de Procuradores de
Derechos Humanos (CCPDH) con el propósito de fortalecer la coordinación y
comunicación para lograr una
estrategia regional que garantice una permanente y
mejor protección de la niñez y, en general, de migrantes
centroamericanos y sus familias; y
de orientar, a los Gobiernos de los Estados miembros del Sistema de la
Integración Centroamericana, hacia el cumplimiento progresivo del derecho
humano al desarrollo de nuestros pueblos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario